En concepción: hablan los músicos

(Por Ignacio Basualto, en Concepción) Cuando la película terminó, el Aula Magna estalló en aplausos y todos se dirigieron a la entrada principal para disfrutar del cóctel inaugural. No había una sola guitarra, batería o amplificador, pero se podía respirar música en el ambiente. De todos los gustos y edades.

Y es que el festival IN-EDIT Nescafé no solo llegó a Concepción como el gran evento audiovisual del segundo semestre, sino que además se constituyó como una instancia fundamental para la escena musical penquista.
Mauricio Basualto, gestor cultural y baterista de los Bunkers, aseguró que «ésta es una instancia de lujo, es un momento de encuentro importante para los músicos, sobretodo porque los documentales sirven para derribar esa barrera fundamentalista que tiene la ciudad, para así aceptar las historias de otros artistas. Es muy positivo».

La inauguración, junto a la exhibición del documental American Interior, sirvió de excusa para la reunión de distintos integrantes de la fauna musical. La mayoría de los músicos presentes elogiaron la cinta, que difícilmente habría llegado a Chile por medio de los cines tradicionales. «La película muestra otra faceta de la música, no tiene enfoque clásico, sino que muestra un contexto en el que se desenvuelven los artistas fuera de su entorno musical. Uno como músico se siente identificado con este tipo de trabajos», opinó Bastián Grañas, líder y vocalista de la banda Mantarraya.

Más allá de las particularidades de “American Interior”, la instancia permitió la interacción entre muchos músicos, de diferentes edades y estilos. Alejandro Venegas, vocalista de Julius Popper, refuerza esta idea: «Estas muestras son necesarias porque además son instancias en las que uno puede compartir con otros artistas de la escena musical en un ambiente que no es el mismo en el que nos solemos encontrar», afirmó.

Sin embargo, con el correr de los días también se observó una alta participación de los músicos en las diferentes presentaciones que organizó el festival. Algunos de los documentales más esperados fueron Metalhead, We don’t wanna make you dance y el ganador del Oscar al mejor documental 2014, A veinte pasos de la fama.

Este último, quizás uno de los más esperados, ya se había presentado el año pasado en edición del festival, pero no contaba con la publicidad que le otorgó ganar el premio de la Academia. «Creo que es importante que a una ciudad tan melómana como Concepción le lleguen historias de estos personajes, porque no siempre son muy famosos, como pasa en este documental», afirma Mauricio Melo, gestor cultural y guitarrista de Los Santos Dumont.

Más allá de los objetivos comerciales y publicitarios del Festival, la mayoría de los artistas que participaron en las exhibiciones destacaron el aporte cultural a la ciudad, que no suele tener mucho movimiento en estas fechas. Es de esperar que sigan existiendo futuras ediciones con muestras aún más completas y, porque no, participantes del medio local.